Pintoresco, colonial y pequeño, este pueblo ubicado muy cerca de Porto Seguro es particularmente conocido por sus 18 kilómetros de playa para todos los gustos. Piscinas naturales, cascadas, tortugas, arrecifes y mucho más es parte de lo que se puede ver en este paraíso bahiano.

Cuándo ir

La mejor época para visitar Arraial D’Ajuda es entre mayo y octubre, y desde diciembre hasta febrero. Eso porque, si bien la ciudad es calurosa durante todo el año, hay meses excesivamente lluviosos.

Clima

El clima de Arraial D’Ajuda es muy agradable durante todo el año, excepto por las constantes lluvias que se presentan todos los meses, especialmente en marzo, abril y noviembre. El resto del tiempo los termómetros suelen alcanzar máximas de entre 26°C y 30°C.

Gastronomía

La gastronomía de Arraial D’Ajuda se guía por los sabores tradicionales de la cocina bahiana. Entre los platos imperdibles, si es que cabe la posibilidad de visitar un restaurante de onda local, no hay que dejar de probar la moqueca bahiana, el vatapa ni el acajaré de frijoles y camarones.

Arraial D’Ajuda es un pueblo pequeño, fácil de recorrer a pie, en el que la mayoría de los restaurantes se concentran en el centro. Por supuesto, como en todo Brasil, también es posible disfrutar de algunas delicias en los chiringuitos de la playa.

Qué ver

Como buen pueblo bahiano, Arraial D’Ajuda se caracteriza por sus callecitas de adoquines rodeadas de casas de colores y una onda muy colonial. Para pedir un deseo hay que visitar la Igreja Matriz Nossa Senhora D’Ajuda y atar en ella una cinta de color.

Pero, más allá del pequeño pueblo, Arraial D’Ajuda es un destino popularmente conocido por sus 18 kilómetros de playas increíbles. En la parte norte, rumbo a Porto Seguro, se hallan Araçaipe y Apaga Fogo, con hermosos arrecifes de coral en los que se forman piscinas naturales ideales para hacer snorkel.

Luego viene la Praia D’Ajuda o de los Pescadores, ubicada en el pueblo y llena de lanchas. Más que para darse un buen baño, resulta pintoresca a la hora de pasear por Arraial. Sin embargo, sí destaca mucho Mucugê, una de las más grandes de toda la costa, con poco oleaje y hermosas piscinas naturales cuando la marea está baja.

Hacia el sur, Parracho es perfecta para nadar y practicar deportes náuticos de día, y para irse de fiesta por la noche. Pero si la idea es algo más tranquilo, mejor irse a Pitinga, con sus acantilados y piscinas naturales a la hora de la marea baja.

Más abajo, Taípe llama la atención por su vegetación y por la laguna Azul, con su pequeña cascada. Cerca está también Río da Barra, donde se puede ver a las tortugas desovar entre septiembre y marzo.