Buenos Aires
Buenos Aires es de esas ciudades a las que se puede ir una o mil veces y nunca aburrirán. Con atractivos clásicos y barrios en constante cambio, la capital argentina siempre sorprenderá con algo nuevo. Pero, más allá de eso, es un lugar que ha sabido mantener la estética de la herencia europea que ganó con la inmigración española e italiana, lo que se puede ver en los edificios de diversos barrios, recordando en ocasiones algunas postales madrileñas.
La ciudad porteña será por siempre uno de los mejores panoramas para los amantes de la buena mesa y también para quienes aman el shopping. Pero también para quienes buscan una escapada cercana que, aún por pocos días, los sorprenda gratamente con panoramas entretenidos.
Cuándo ir
La mejor época para visitar Buenos Aires es durante el otoño (marzo - junio) y primavera (septiembre - diciembre), pues es una ciudad con climas muy fríos durante el invierno y de mucho calor en el verano.
Clima
Buenos Aires tiene un clima templado húmedo gracias a su cercanía con el río de La Plata. Es por eso que en verano suele haber lluvias abundantes con mucho calor, aunque también es posible encontrarse con precipitaciones durante el invierno.
Gastronomía
Buenos Aires se caracteriza por tener las mejores carnes del mundo. En ese sentido, el bife chorizo y las milanesas son los reyes indiscutidos de los restaurantes que se enfocan en este tipo de comida, que en general ofrecen todo tipo de cortes de vacuno; un clásico es pedir las carnes "a caballo", un plato que las combina con papas, cebolla y huevos fritos. Por otro lado, la influencia de los inmigrantes italianos se deja ver en los cientos de pizzerías y restaurantes de pastas, en los que es fácil irse a la segura en precio y calidad.
En la ciudad no hay un solo barrio enfocado en la gastronomía, pues es posible encontrar restaurantes en las diversas zonas turísticas, como Recoleta, Puerto Madero, San Telmo, Palermo, el micro centro, etcétera.
Qué ver
El centro de Buenos Aires es conocido por tenerlo todo: muchísimo comercio, exquisitos y variados restaurantes, monumentos y vida nocturna. Allí, en plena Avenida 9 de Julio, se encuentra el famoso Obelisco, que se ha convertido en el ícono de la capital argentina. En la misma vía está el Teatro Colón, un clásico edificio de principios del siglo XX, considerado como el mejor teatro lírico del mundo. Muy entretenidas resultan también las callecitas del micro centro, la zona comprendida entre la 9 de Julio y el río de La Plata, como Lavalle, Florida, Esmeralda, Tucumán, etcétera.
Hacia el sur se encuentra la Plaza de Mayo y, en ella, la Casa Rosada, sede de Gobierno. Cerca está también el famoso barrio de Puerto Madero, que recorre buena parte de la costa del río de La Plata; hoy es una zona con excelentes restaurantes y un sitio muy visitado por los viajeros, pues allí se encuentra el Puente de la Mujer, otra de las postales clásicas de Buenos Aires.
Muy cerca, el barrio de San Telmo ha ido en alza con el paso de los años. Si en un principio atraía los domingos por la feria de anticuarios de la plaza Dorrego, hoy la onda se ha expandido a los alrededores, rescatando antiguas casas y edificios para convertirlos en tiendas de diseñadores, restaurantes y cafeterías. Además, un paseo por sus calles ofrece entretenidos espectáculos al aire libre, en los que la música y las artes son los protagonistas.
Caminito es otro de los sitios imperdibles de la capital. Ubicado en el barrio de La Boca, esta zona se caracteriza por las pintorescas casitas de colores se han tomado las calles de adoquines. En ellas, tiendas de diseñadores y también de souvenirs, cafeterías y artistas locales se entremezclan con los espectáculos callejeros de tango, generando un entretenido ambiente lleno de música junto a la boca del río de La Plata. Muy cerca está también el estadio de Boca Juniors, uno de los equipos más figurativos del país.
No es posible irse de Buenos Aires sin dar un paseo por el barrio de la Recoleta, que concentra algunos de los atractivos más característicos de la capital. Allí se encuentran, por ejemplo, el Cementerio de la Recoleta, donde descansan los restos de diversas personalidades como Eva Perón, el Museo de Bellas Artes y decenas de tiendas, restaurantes y cafeterías que rodean el gran parque.
Finalmente, Palermo es otro de los grandes atractivos de la ciudad. No sólo es el barrio donde se desarrolla lo mejor de la vida nocturna bonaerense, sino también uno de los sitios revividos por diseñadores independientes que decidieron instalar allí sus tiendas. Imperdible resulta un paseo a pie o en bicicleta por los Bosques de Palermo y por el Jardín Japonés, un espacio de paz y armonía en medio de la ciudad, que ha logrado rescatar diversas especies botánicas.
Compras
Uno de los grandes motivos por los que muchos turistas visitan Buenos Aires es el shopping. En ese sentido, la ciudad tiene barrios temáticos para comprar diferentes cosas, incluyendo ropa, libros y prendas de cuero. Por supuesto, nunca faltan las ofertas en los outlets.
Santa Fe es una de las calles comerciales por excelencia. Allí, entre la Avenida 9 de Julio y el barrio de Palermo, una otras otra enfilan tiendas de moda, accesorios, zapatos y mucho más. En esta avenida se encuentra la famosa librería Ateneo Grand Splendid, una de las librerías más lindas del mundo, pues fue diseñada en un antiguo teatro, respetando la distribución del lugar. Pero si de libros se trata, lo mejor será caminar por la calle Corrientes, donde existen desde grandes cadenas hasta pequeñas tiendas que los venden de segunda mano a muy buenos precios.
Para quienes quieran comprar prendas de cuero, de esas que pueden durar décadas manteniendo su calidad, lo mejor es dirigirse a la calle Murillo y sus alrededores, donde existen decenas de tiendas con chaquetas, pantalones, carteras, bolsos, billeteras, cinturones y todo tipo de accesorios.
Si de outlets se trata, la calle Aguirre es la que lleva la delantera. Las mejores y más reconocidas marcas de ropa y accesorios se han instalado allí con excelentes precios.