Estocolmo
Estocolmo, la capital y ciudad más grande de Suecia, está compuesta por 14 islas y se ubica donde el lago Mälar desemboca en el mar Báltico. En el este de la ciudad, y a lo largo de la costa, se encuentra la cadena de islas conocida como el archipiélago de Estocolmo, con más de 24 mil islas.
La urben forma parte del grupo de ciudades conocidas como las venecias del norte debido a sus canales. Además, en Estocolmo se localizan importantes universidades, el museo no relacionado con el arte más visitado de Escandinavia y un metro conocido como la galería de arte más grande del mundo. Allí también se realiza la ceremonia anual de los Premios Nobel desde 1901.
Fundada como ciudad en 1252, Estocolmo es hoy una de las más bellas de Europa y te espera en un ambiente ordenado y cosmopolita que enamora e invita a recorrer todos sus rincones.
Cuándo ir
El mejor momento para visitar Estocolmo es el verano, de junio a agosto, cuando las temperaturas son agradables para estar al aire libre. El mes más caluroso es julio, y junio es generalmente es el más soleado y con los días más largos. Sin embargo, siempre es conveniente llevar ropa abrigada, como un abrigo y un suéter para la noche y los días frescos.
Clima
El clima en Estocolmo es semi-continental. El invierno es muy frío: la temperatura promedio se mantiene por debajo de cero desde diciembre a febrero. En cambio, el verano, de junio a agosto, es agradable, con temperaturas de alrededor de 22°C grados y días muy largos (sobre todo junio); las noches pueden ser muy frescas o incluso frías, ya que la temperatura puede descender por debajo de los 10 grados. Aproximadamente desde mediados de mayo hasta fin esde julio son las noches blancas, cuando nunca oscurece por completo.
Gastronomía
En Suecia la gastronomía ocupa un lugar importante. Los platos más recomendables para probar en Estocolmo son el råraka (un crepe preparado con caviar y papas), el kottbullar (albóndigas fritas de carne de vaca y cerdo, huevo y leche), la smörgåstårta (una especie de torre salada con capas de jamón, camarones, atún y huevo), el kroppkakor (una especie de papas rellenas, ya sea de cebolla y cerdo, cebolla y hongos, o panceta, que suele acompañarse con arándanos y mantequilla) y pescados como el arenque y el salmón en diferentes formas. Además, nunca faltan el pan y el queso: los más populares son el svecia y el västerbotten, mientras que en lo que respecta al pan, el knäckebröd (de centeno bien crujiente) y el kavring (macizo, de centeno) son los más típicos.
Si te gustan los dulces, puedes probar los kanelbullar o rolls de canela, y la hjortronparfait, una tarta helada de bayas. Y aunque sea propio de Navidad, tal vez tienes la suerte de probar el glögg, un vino tinto caliente con azúcar y especias.
Qué ver
Sin dudas lo primero a mencionar es el Gamla Stan, el centro histórico de Estocolmo. En sus calles estrechas y adoquinadas encontrarás tiendas, edificios medievales y plazas como la Järntorget y la Köpmantorget. La plaza Stortorget, rodeada de hermosas casas con fachadas de colores, debe ser uno de los sitios más bellos de la ciudad. Cerca verás la iglesia medieval Riddarholmen, la catedral de San Nicolás, el Palacio Real, el Parlamento (que se encuentra en la isla de Helgeandsholmen, separado por un estrecho canal del Gamla Stan) y el Museo Nobel.
Otros barrios interesantes son Östermalm y Södermalm. Este último es una zona hipster y bohemia en la que se han instalado importantes artistas de vanguardia. Hay tiendas alternativas, galerías de arte, casas de decoración, cafés de diseño, diversos puntos de interés y excelentes lugares para observar el atardecer. Östermalm, por su parte, cuenta con enormes caserones y establecimientos de exquisita arquitectura, la mayoría del siglo XVII.
Si buscas buenas vistas de la ciudad, el Stadhuset o Ayuntamiento es tu lugar. Situado a orillas de la isla Kungsholmen, sobresale por sus ladrillos rojos y la torre con una aguja de tres coronas, siendo una de las imágenes más icónicas de la ciudad.
¿Fan del arte? La red de metro de Estocolmo es una de las más impresionantes del mundo, con 90 de sus 100 estaciones decoradas con obras de reconocidos artistas. Además, ha sido declarada la galería de arte más larga del mundo.
Si quieres algo de verde y museos, en la isla de Djurgården se halla la mayoría de los museos importantes de Estocolmo, como el Skansen (el museo al aire libre más antiguo del mundo) o el Vasa (construido para albergar el barco de guerra Vasa, recuperado luego de estar 331 años hundido).
Para ver de cerca la vida local, el parque Kungstradgarden es ideal, ya que es el más popular entre los locales y muy bonito, sobre todo en primavera con la floración de los cerezos. Allí podrás pasear y también tomar algo en alguna de sus cafeterías. Otra opción es navegar en un barco, y hay varias opciones: paseos de pocas horas por los canales de la ciudad, una ruta por las cercanas islas Fjäderholmarna o algo más largo de isla en isla por el archipiélago.