Fiji
Fiji, un país insular de Oceanía ubicado en el océano Pacífico, es un archipiélago de 333 islas. Las más importantes, Viti Levu y Vanua Levu, albergan la mayor parte de la población. En Viti Levu se encuentra la capital, Suva, una ciudad puerto con arquitectura colonial británica.
Mamanucas y Yasawa, que se extienden en arco frente a la costa de Viti Levu, son una cadena de hermosas islas bordeadas de palmeras, con playas de arena blanca, plácidas lagunas y hermosos complejos turísticos. Se trata de la joya turística de Fiji, donde la relajación es lo más importante. La mayoría de los visitantes pasa el día tomando sol, practicando snorkel o buceando, con caminatas entre pequeñas aldeas o a una colina para ver la puesta de sol. Las noches suceden tranquilas en los bares y restaurantes de los complejos.
No importa si pasas los días nadando sobre arrecifes, buscando cascadas en los senderos, bebiendo kava o descansando en la playa: en Fiji tienes el disfrute garantizado.
Cuándo ir
De abril a octubre es la mejor época para viajar a Fiji, cuando el aire no es tan caluroso y en la mayoría de las regiones las precipitaciones son mucho menores. Además, se evita el riesgo de ciclones.
Clima
Las islas Fiji tienen un clima tropical con una estación cálida, húmeda y lluviosa de diciembre a abril, cuando aumenta la probabilidad de ciclones. También tiene una estación fresca de junio a octubre. Las precipitaciones, aunque frecuentes en toda la isla, son más abundantes en el este: unos 3.000 milímetros anuales contra unos 1.800 milímetros en el oeste.
La estación fresca es relativamente seca, especialmente en las islas pequeñas y planas, pero también en las laderas del noroeste de las islas principales (Vanua Levu y Viti Levu). En cambio, en las laderas del este, expuestas a los vientos alisios, puede haber frecuentes chubascos y tormentas incluso en esta época.
La temperatura máxima en Suva, la capital de Fiji, es de alrededor de 31 °C de diciembre a marzo, y baja a 27 °C de junio a septiembre, con mínimas que rara vez descienden de los 20 °C.
Gastronomía
La cocina tradicional es una mezcla de las gastronomías de la Polinesia, Melanesia, India, China y Occidente. Una de las comidas más famosas es el lovo, que significa "festín cocinado en la tierra", ya que es exactamente eso. Cerdo, pescado, cordero y verduras se envuelven en hojas de plátano y se cuecen a fuego lento sobre piedras calientes en la tierra. Si bien el lovo sólo se prepara en ocasiones especiales, algunos complejos turísticos y casas de familia lo preparan para sus huéspedes. Seguramente te lo sirvan con tavioka (yuca) y dalo (taro), las verduras favoritas de la isla.
En los menús de los resorts y restaurantes urbanos encontrará el kokoda, una ensalada de pescado marinado en lima y crema de coco, con pepinos, cebollas, tomates y pimientos, servida en un coco; el palusami, carne, cebolla y crema de coco envueltas en hojas de taro; o baigan valo, berenjenas rellenas con pescado o salsa picante, cubiertas con crema de coco.
La influencia india y china es evidente. En los bordes de las carreteras suele venderse roti relleno de calabaza o berenjena, y curry de coco, y en las curry house encontrarás curry llenos de sabor. En los locales de comida china, el arroz frito, chop suey y chow mein son los preferidos.
En cualquier mercado, desde el ajetreado Mercado Municipal de Suva, hasta los pequeños de los pueblos más recónditos, encontrarás frutas tropicales como papaya, piña, guanábana, mango, maracuyá, coco, longan y sandía.
El kava, por su parte, es la bebida nacional de Fiji, aunque las islas también producen ron, café y cerveza.
Qué ver
Recorrer la cálida Suva ofrece una combinación del Fiji colonial con el contemporáneo. Bonitos edificios y monumentos antiguos pueblan el animado puerto, mientras que el centro alberga modernos establecimientos comerciales y puestos de artesanía muy frecuentados. El Mercado Municipal y el Museo Nacional son dos paradas interesantes.
Para una visión auténtica de Fiji, alójate en una casa de familia o visita las aldeas. En la isla principal de Viti Levu puedes ir a Navala, cuyas construcciones consisten en muros de bambú tejido, techos de paja y cuerdas de fibras. Te recibirán con una ceremonia kava o un festín de amor. Asegúrate de llevar un sevusevu (regalo) para ofrecérselo al jefe de la aldea a tu llegada; la raíz de kava, que puedes conseguir en cualquier mercado del país, es el regalo más común.
Con ésta última se elabora el kava o yagona, la bebida preferida. Se le añade una especie de pimienta que se muele finamente, se mezcla con agua y se sirve en una tanoa (cuenco de madera) o en un bilo (una taza de coco). La bebida parece agua turbia, es un poco amarga y tiene efecto sedante. Forma parte fundamental de la cultura, pues diariamente la gente se reúne a beberla. La mayoría de los alojamientos y casas de familia ofrecen ceremonias de kava a sus huéspedes, aunque también puedes probarlo en un café o prepararlo tú mismo en una de las tiendas de las islas.
Aunque Fiji ofrece increíbles lugares para practicar snorkel en casi todos los lados, en las islas Yasawa hay enormes mantarrayas que se deslizan por sus aguas. Si te gusta la adrenalina, también puedes bucear cerca de enormes tiburones toro y tigre en la Reserva Marina de Shark Reef. En cambio, si buscas deslizarte con calma entre arrecifes, frente a las costas de Vanua Levu y Taveuni se encuentra el famoso arrecife Arco Iris, que cuenta con 390 especies de coral y unas 1.500 especies de peces. Si el buceo es tu gran pasión, piensa tal vez en un crucero de varios días para visitar lugares vírgenes e islas remotas.
Si te gusta el surf, Fiji es uno de los principales destinos de este deporte en el mundo, con olas casi perfectas que van desde suaves rompientes aptas para principiantes, hasta tubos sobre arrecifes de coral.
La isla Jardín de Taveuni es famosa por sus aves, y cuenta con lugares privilegiados para observarlas como el selvático pico Des Voeux, hábitat de la escurridiza paloma anaranjada y de la diminuta cola de seda. También se puede visitar el Parque del Patrimonio Nacional de Bouma para recorrer el paseo costero de Lavena en una caminata que recorre playas de arena negra y acantilados volcánicos, o ir a las cataratas Wainibau, bellamente enmarcadas por un pasadizo por el que se puede nadar para disfrutar de una mejor vista. Aunque las aves no sean de tu devoción, recorrer estos sitios a caballo, en bici o caminando deben estar en tu lista de todas formas.
Si bien las playas suelen acaparar la atención de los turistas, merece la pena llevar un par de botas de montaña. Islas como Taveuni, Vanua Levu y Viti Levu son famosas por sus montañas y cascadas, mientras que los recorridos por las islas Yasawa y Mamanuca permiten conocer sitios como la cueva de Sawa-i-Lau.
Después de un día buceando, caminando, haciendo surf o simplemente al sol, ¿quién no quiere relajarse un rato? Por suerte algo que en Fiji se hace excepcionalmente bien son los tratamientos de spa, que incluyen desde envolturas corporales tropicales hasta el tradicional masaje Bobo. Déjate envolver por el aroma del aceite de coco y que tu cuerpo se libere del estrés. Una experiencia emblemática en la mayoría de los balnearios es el masaje a cuatro manos, en el que dos masajistas ofrecen el tratamiento al mismo tiempo.