Los Ángeles es lujo, sofisticación, bohemia, vanguardia, sol y playa. Todo en un mismo lugar. Por eso es considerada una de las ciudades más importantes -y, por cierto, la más vibrante- de toda California.

Hollywood, Beverly Hills, Venice Beach, Malibú y cada rincón de Los Ángeles es un destino por conocer en sí mismo. ¿Que cuántos días hacen falta para recorrerla por completo? Varias semanas, sin duda. Pero con suficiente tiempo se puede disfrutar al máximo de su exquisita onda.

Los mejores meses para visitar Los Ángeles son entre marzo y mayo, y entre septiembre y noviembre, pues la primavera y el otoño regalan exquisitas temperaturas ideales para disfrutar de la playa y la ciudad. Si bien los termómetros suben mucho en verano, ésta es también la temporada alta turística y la época de vacaciones para el hemisferio norte, por lo cual la ciudad suele verse atiborrada de gente. 

Los Ángeles tiene un clima de tipo desértico, con temperaturas moderadas por el océano Pacífico que le permiten gozar de un excelente clima subtropical durante todo el año. En verano las temperaturas pueden alcanzar los 27°C con alta humedad, mientras que en invierno bordean los 18°C con frecuentes lluvias que se concentran principalmente en enero y febrero. 

Los sabores de Los Ángeles están fuertemente marcados por la influencia española y mexicana, pero en los diferentes restaurantes de la ciudad han sabido añadirle un toque local muy particular a cada plato. Además, su cercanía con la costa le permite ofrecer una enorme variedad de pescados y mariscos en diversas preparaciones.

Entre los platos más clásicos de Los Ángeles se encuentra el ya famoso California Roll, un tipo de sushi que se habría originado en el barrio de Little Tokyo, en el que el arroz envuelve los demás ingredientes, que suelen ser cangrejo, palta y pepino. Otro clásico es el french dip sandwich, que lleva carne de ternera a medio punto, pimiento, cebolla y queso, acompañado con papas fritas. De influencia mexicana, hay que probar la chili burger y los tacos, muy populares en los food trucks callejeros; uno de los más conocidos es, sin duda, el short rib taco.

En cuanto a lo dulce, en Los Ángeles abundan los helados cubiertos con hot fudge de chocolate, como también las donuts. Y, por otro lado, tampoco hay que dejar de probar los deliciosos vinos californianos, sobre todo el cabernet sauvignon, el chardonnay el merlot, el pinot noir, el sauvignon blanc y el zinfandel.

Comienza tu recorrido en el downtown, el centro financiero y cívico de Los Ángeles, que agrupa a los principales edificios administrativos. Eso sí, hazlo de lunes a viernes, porque el fin de semana todo allí cierra. Podrás conocer el Ayuntamiento de Los Ángeles, el famoso auditorio Walt Disney Center Hall, la moderna Catedral de Nuestra Señora de Los Ángeles y la U.S. Bank Tower, la torre más alta de la ciudad. No dejes de caminar por la zona peatonal de la Grand Avenue, inspirada en los Campos Elíseos parisinos, ni tampoco de dar una vuelta por el Fashion District, un conjunto de calles donde encontrarás de todo. Por su parte, si te gusta el arte, también puedes visitar el Museo de Arte Contemporáneo (MOCA).

Con el emblemático letrero de Hollywood como telón de fondo, este vecindario es uno de los lugares más entretenidos para visitar en Los Ángeles. Eso sí, si quieres sacarte una foto junto a las letras, debes saber que no puedes acercarte a ellas, por lo que los mejores spots para ello son Lake Hollywood Park y Deronda Gate. Además, en el cuarto piso de Hollywood & Highlands existe un mirador que, aunque siempre está lleno de gente, ofrece buenas vistas al letrero. Si visitas este último lugar, no dejes de recorrer este centro comercial que se encuentra en el corazón del barrio, donde además se halla el Dolby Theater, donde se entregan los premios Oscar.

Sin embargo, definitivamente el sitio más visitado de Hollywood es el Paseo de la Fama, una zona en la que se les rinde homenaje a las más grandes celebridades de todo el mundo, a través de estrellas rosadas insertadas en el suelo. Por otro lado, en el Teatro Chino Grauman también existe una vereda que guarda una colección de autógrafos y firmas de manos y pies de diversas estrellas. 

Si eres amante del cine, no dejes de conocer el Museo de Historia de Hollywood, que guarda objetos de decenas de películas estadounidenses, incluidos los escenarios de las más emblemáticas, como la celda de Hannibal Lecter. Además, resulta entretenida una visita a Universal Studios, donde se encuentran algunos estudios de cine y televisión que se pueden recorrer a bordo de un tranvía, además de un increíble parque de diversiones. Así también, vale la pena dejar un tiempo para el Warner Brothers Studio, que ofrece un tour para recorrer diferentes sets de películas -como Casablanca y Batman- y programas de televisión -como el Central Perk de Friends, el departamento de The Big Bang Theory y Gilmore Girls.

En Los Ángeles no puede faltar un recorrido por el barrio de Beverly Hills, famoso por sus grandes mansiones que la han convertido en la zona más lujosa de la ciudad, pues en ella se encuentran las residencias de muchas celebridades y millonarios, reunidas principalmente en Mulholland Drive. Para comenzar, lo mejor es visitar Rodeo Drive, con sus tiendas de lujo, y la vecina Canyon Drive, repleta de excelentes restaurantes. Si te gusta la onda más bohemia, también debes conocer Sunset Strip, llena de tiendas, centros comerciales, galerías de arte, discotecas y eventos. Otra famosa calle es Melrose, el sitio perfecto para irse de compras, pues en ella hay locales con todo tipo de productos. 

Si hablamos de barrios de inmigrantes, hay dos que no te puedes perder: el primero es Little Tokyo, una zona que mezcla edificios tradicionales y contemporáneos con espacios como el Jardín Japonés James Irvine, el Templo Budista Koyasan y muchos restaurantes con comida local. El segundo es Chinatown, con su hermosa plaza central, las galerías de arte de Chung King, el Templo Thien Hau y Olvera Street, la calle más antigua de Los Ángeles.

Vecine Beach es una de las playas más cercanas a Los Ángeles, con un entretenido espíritu bohemio que le da una onda especial. No dejes de dar un paseo por el Boardwalk ni de pasar un día de sol y mar en Muscle Beach, que buen honor le hace a su nombre. Si tomas Ocean Drive hacia el norte -a pie o en bicicleta, pues solo son 2 kilómetros-, llegarás a la localidad Santa Mónica, con su famoso muelle junto al cual se encuentra Pacific Park, el popular parque de diversiones con la emblemática rueda de la fortuna que hemos visto en tantas películas y postales.

Algunos kilómetros hacia el norte está la exclusiva zona de Malibú, con playas espectaculares para practicar surf, entre las que destacan Zuma Beach, Point Dume State Beach, Matador Beach, Surfrider Beach y Paradise Cove. 

Finalmente, en la parte sur de Los Ángeles se halla Manhattan Beach, una de las playas más hermosas de la zona, con su muelle como telón de fondo. Además, si te quedas hasta la tarde puedes aprovechar de tomar algo en alguno de sus bares.