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Francia

Lourdes

Lourdes
Lourdes se ubica en el suroeste de Francia, en los Altos Pirineos. La ciudad es reconocida ya que en ella se encuentra la gruta donde apareció la Virgen que lleva el nombre del lugar, la basílica en su honor y la iglesia que lleva el nombre de la joven ante quien hizo aparición la virgen, Bernadette Soubirous.

Más allá del turismo religioso o los viajes espirituales, Lourdes tiene un atractivo que merece ser descubierto: un castillo con fortificaciones que datan de la Edad Media, un funicular que otorga preciosas vistas de la ciudad, actividades al aire libre y varios eventos que congregan a millas de turistas anualmente.
Lourdes es un lugar muy especial y significativo para muchas personas debido a su importancia religiosa y espiritual, pero también gracias a su rica historia, cultura y los impresionantes paisajes que la rodean. Como ves, es difícil que un viaje a Lourdes no te garantice el disfrute.

Cuándo ir

La mejor época para visitar Lourdes es entre los meses de mayo a septiembre. Aunque puedes visitarla durante todo el año si solo viajas por motivos religiosos, si quieres disfrutar de la ciudad y sus atractivos naturales, lo mejor es ir en primavera o en verano.

Clima

Lourdes disfruta de un clima templado húmedo, lo que significa que los veranos son suaves, y los inviernos, fríos y húmedos. Los meses más cálidos y secos son junio, julio y agosto, con temperaturas medias diarias de alrededor de 25 °C. Durante el invierno, diciembre, enero y febrero, las temperaturas medias diarias son de alrededor de 6 °C. Las precipitaciones están distribuidas uniformemente a lo largo de los meses, aunque noviembre es el mes más lluvioso, con más de 110 milímetros de precipitaciones, mientras que julio es el más seco.

Gastronomía

La cocina de Lourdes se caracteriza por el uso de ingredientes frescos propios del lugar, como quesos, carnes, verduras, pescado, e incluso vinos de viñedos locales.

Un plato típico es la garbure, una sopa de verduras y porotos blancos con carne. El cassoulet es un guiso tradicional de frijoles blancos, carne de cerdo, salchichas y a veces pato o cordero. El magret de canard es un filete de pato a la parrilla o asado, generalmente servido con una salsa de frutas. La trucha de los Pirineos se encuentra en los ríos cercanos, y generalmente se sirve a la parrilla o frito. Los quesos, embutidos y vinos locales también son una excelente opción para probar.

Si deseas comer postres u opciones dulces, no puedes perderte las millas, una especie de flan compacto con una costra dorada, o la famosa tarta tatin, una tarta invertida de manzanas caramelizadas.

Si paseas a orillas del río Gave de Pau o recorres las avenidas comerciales, encontrarás bares, cafés y restaurantes donde deleitarte con estas ricas recetas. Imprescindible es visitar las Halles de Lourdes, un mercado donde te encontrarás con productores y comerciantes deseosos de que descubras todas las especialidades de los Pirineos.

Qué ver

Cada año Lourdes recibe miles de turistas movidos por la fe, pues es uno de los centros de peregrinación católica más importante del mundo. Sin duda el corazón del recorrido turístico comienza en el santuario de Nuestra Señora de Lourdes, un complejo de 52 hectáreas con más de 22 lugares de culto al que llegan cerca de 8 millones de peregrinos cada año, muchos de los cuales van en busca de las aguas milagrosas del manantial. Es posible beberla, mojarse la cara, bañarse en las piscinas e incluso llevársela a casa.

Entre otros sitios de importancia puedes visitar la basílica subterránea de San Pío X, muy cerca de la entrada al santuario, luego la basílica del Rosario y la de la Inmaculada Concepción, para terminar en la gruta de Massabielle, el lugar donde Bernadette vio a la Virgen, y en el que diariamente se celebran misas al aire libre.

Saliendo del santuario se puede cruzar el Pont Saint Michel para llegar al molino de Boly, el hogar natal de Bernadette Soubirous, donde se explica la historia de la familia y de las apariciones de las que Bernadette fue testigo.

El santuario no es todo. El castillo-fortaleza, situado en una posición estratégica en lo alto de un peñón rocoso, fue residencia de los condes de Bigorre y convertida posteriormente en prisión. Hoy alberga el Museo Pinenaico y en su interior se puede descubrir la historia y las culturas de quienes vivieron en la cadena pirenaica franco-española entre los siglos XVIII y XX. Desde las murallas del castillo hay una hermosa vista de la ciudad, los santuarios y las montañas.

Si prefieres estar en contacto con la naturaleza y disfrutar de unas magníficas vistas a la ciudad, puedes visitar la cima Pic du Jer. Se trata del punto más alto de Lourdes, al que puedes acceder en funicular. Una vez arriba, hay un sendero que conduce hasta el observatorio en el que se encuentra un mirador que ofrece una panorámica de 360° sobre la ciudad de Lourdes y desde el que también se pueden ver pueblitos como Tarbes y Pau, el valle de Argelès Gazost y muchas cimas del Pirineo. El lugar es perfecto para hacer un picnic, relajarse, pasear e incluso hacer alguna ruta senderista si vas con tiempo.

Lourdes está rodeada de hermosos paisajes donde realizar diferentes actividades y deportes. Hay una gran cantidad de ríos y arroyos, como el río Gave de Pau, donde practicar rafting, kayak o pesca. Los Pirineos ofrecen rutas y puertos de montaña ideales para pedalear, además de caminos para hacer senderismo, lo que la convierte en un lugar ideal si te gusta explorar la naturaleza y disfrutar de las hermosas vistas panorámicas.

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