Luján de Cuyo
Ubicada a sólo 30 minutos de
Mendoza, la ciudad de Luján de Cuyo es la puerta de entrada a uno de los
parajes vinícolas más alucinantes de Argentina. Y es que esta localidad es la
que le ha otorgado una serie de vinos premiados, entre los que el Malbec se
lleva todas las miradas.
Pero, además, los alrededores
de la ciudad son el escenario ideal para el turismo aventura y para el relajo, pues
a poco tiempo de viaje se hallan las espectaculares Termas de Cacheuta.
Cuándo ir
Al igual que Mendoza, la
mejor época para visitar Luján de Cuyo es entre abril y septiembre. Esto se
debe a que, por su situación geográfica, el valle sube sus temperaturas a muy
altos niveles durante el verano.
Clima
En Luján de Cuyo, el
clima es de tipo árido, lo que se traduce en inviernos fríos, con temperaturas
que no superan los 18°C, y veranos calurosos, en los que puede alcanzar los
34°C.
Gastronomía
La cultura culinaria de Luján
de Cuyo es bastante similar a la de Mendoza, donde las carnes a la parrilla
reinan en lo alto. Bife de chorizo, lomo, mollejas, morcillas, milanesas y
empanadas son preparaciones que jamás van a faltar en la carta de cualquier
asador.
Sin embargo, en esta ciudad y
sus alrededores todo gira en torno al vino, por lo que conviene siempre buscar
restaurantes donde la comida se pueda maridar con las mejores cepas que se
producen en el valle. Imposible dejar de tomar una buena copa de Malbec, el
ícono siempre premiado de Luján de Cuyo.
Qué ver
La ciudad de Luján de Cuyo es
sencilla y, en general, es más bien una puerta de ingreso para sumergirse en el
mundo del vino que tanto caracteriza a la zona. En sus alrededores existen más
de 55 bodegas de diversos tipos, siendo las más atractivas aquellas de corte
familiar y estilo boutique.
Cada viña ha creado
experiencias turísticas de diferente onda, para recibir a los visitantes con
paseos por los viñedos y sus bodegas, finalizando con degustaciones. Entre
ellas destacan: A 16, Achaval Ferrer, Alpamanta Estate, Altavista, Belasco de
Baquedano, Benegas, Bonfati, Bressia, Budeguer, Cabrini, Caelum, Calle, Carmine
Granata, Casarena, Catena Zapata, Cavas de Weinert, Chandón, Clos de Chacras,
Cruzat, Dante Robino, Susana Balbo Wines, Familia Adrover, Finca Decero, Hacienda
del Plata, Bodega Kaiken, Krontiras, Lagarde, Lamadrid Estate Wines, Luigi
Bosca, Melipal, Mendel Wines, Miguel Minni, Nieto Senetiner, Norton, Otaviano,
Otero Ramos, Carmelo Patti, Pulenta Estate, Pulmary, R.J. Viñedos, Renacer,
Ruca Malen, San Huberto, Séptima, Stpahyle, Zolo, Terra de Los Andes, Tierras
Altas, Viña Cobos, Vistalba, Foster Lorca, Casa Tapaus, Viamonte, Dolium Bodega
Subterránea, Familia Blanco Wines, Hilbing & Franke Destillery, Montecuyo,
Piattelli Vineyards, Bodega Matervini, Trez Wines, Finca La Anita, Sottano –
Colosso Wines, Estrella de Los Andes y Cavas Rosell Boher.
Pero, más allá del vino, Luján
de Cuyo tiene paisajes naturales perfectos para todo tipo de deportes aventura.
Sus ríos, embalses y montañas son el escenario ideal para practicar actividades
como rafting, bungee, ciclismo, cabalgatas, kayak y mucho más.
Por otro lado, la localidad de
Cacheuta es conocida por sus aguas termales, donde las Termas de Cacheuta y el
Parque de Agua Termal, que se encuentran integrados, ofrecen la opción de
disfrutar de sus exquisitas aguas que oscilan entre los 28 y los 40°C. No sólo
son el panorama ideal para relajar el cuerpo, sino también para calmar algunas
dolencias reumáticas.