Málaga
Ubicada
en plena Costa del Sol, la ciudad de Málaga es uno de los balnearios más
hermosos de España, pero también un lugar que concentra gran parte de la
historia de la zona, desde la llegada de los musulmanes hasta la conquista por
parte de los Reyes Católicos.
Cuándo ir
Al
ser una ciudad de playa, los mejores meses para visitar Málaga son los de
verano, entre junio y agosto. Sin embargo, los meses de marzo, abril y mayo
también pueden ser buenos, aunque la temperatura del mar Mediterráneo está algo
más fría.
Clima
En
Málaga el clima es templado a lo largo de todo el año. En verano las
temperaturas pueden bordear los 30°C, mientras que en invierno las máximas no
suelen descender de los 20°C, con lluvias escasas.
Gastronomía
Málaga
aprovecha su cercanía con el mar Mediterráneo para abrir paso a una exquisita
cocina en la que reinan los pescados y mariscos frescos. Muchos platos
contienen especies fritas, como calamares, sardinas, jureles y boquerones, que
se pueden comer como snack. Así también, destaca el espeto, una brocheta con
sardinas asadas a las brasas, que se pueden probar en la playa del Pedregalejo.
El
bacalao cumple un rol fundamental en muchos platos, como lo son acompañado por
arroz o en papandúa, que lleva también levadura y azafrán. Sin embargo, para el
calor en Málaga reinan las zopas frías, siendo el gazpacho una de las recetas
más preparadas.
Qué ver
El
centro histórico concentra la mayoría de los atractivos de Málaga. Una buena
forma de partir recorriendo la ciudad puede ser en La Alcazaba, una fortaleza que
construyeron los musulmanes durante el siglo XI, para luego pasar a manos
nazaríes. Junto a este sitio está también el Teatro Romano, construido durante
el siglo I d.C., pero descubierto recién en 1951.
Durante
el siglo XIV se edificó el Castillo de Gibralfaro para proteger a La Alcazaba y
albergar a las tropas. Tras la conquista española se convirtió en la residencia
de verano de los reyes y hoy se puede visitar para obtener hermosas vistas de
la ciudad desde las alturas, pero también para conocer su Centro de
Interpretación.
Cerca
de La Alcazaba se halla el Museo Picasso Málaga, considerado un personaje
ilustre para la ciudad por haber nacido ahí. El Palacio de Buenavista es el
encargado de almacenar más de 200 obras del artista, una colección que se
renueva periódicamente.
Vale
la pena también ir a darse una vuelta a la Catedral de la Encarnación, que
mezcla el estilo gótico con el renacentista. Se le conoce popularmente como La
Manquita, ya que una de sus dos torres nunca fue terminada.
Desde
allí es posible llegar fácilmente a la calle Marqués de Larios, una elegante
vía peatonal que reúne a las marcas más exclusivas de moda, instaladas en
edificios arquitectónicos de indiscutible belleza. No muy lejos se alza el
Mercado Central de Atarazanas, ubicado en un antiguo astillero de origen
nazarí, ideal para disfrutar de las delicias gastronómicas de la ciudad.
Antes
de irse de lleno a la playa, es posible caminar por el tranquilo Parque de
Málaga rumbo al Muelle Uno. En él se ubica el puerto y se ha convertido en toda
una zona comercial lleno de vida al aire libre. En su extremo se alza La
Farola, un faro que desde hace más de 200 años guía a los barcos que navegan
por el Mediterráneo.
Desde
el Muelle Uno es fácil llegar a la playa La Malagueta, que con 1,2 kilómetros
de extensión atrae a miles de personas que buscan disfrutar de las cálidas
aguas del Mediterráneo.