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Máncora

Máncora

Máncora es una ciudad situada en el norte de Perú, conocida por ser uno de los balnearios más famosos del país. Con extensas costas, tiene playas para todos los gustos, desde las más tranquilas hasta aquellas con las mejores olas para practicar surf, windsurf y kitesurf. Si bien el centro de Máncora es uno de los lugares con mayor actividad turística, comercial y gastronómica de toda la zona, en sus alrededores hay hermosos pueblos que vale la pena visitar.

Cuándo ir

Máncora tiene la fortuna de contar con un excelente clima durante todo el año, por lo que cualquier momento es bueno para conocerlo. Hay que tener en cuenta, eso sí, que durante el verano se produce la temporada alta turística y febrero es el més más lluvioso.

Clima

Máncora tiene un clima muy agradable para disfrutar del sol y la playa durante todo el año. Entre enero y mayo las temperaturas suelen sobrepasar los 30°C y son los meses más lluviosos. Por el contrario, el resto del año es bastante seco y las máximas bordean los 28°C.

Gastronomía

Si bien en Máncora es posible deleitarse con los clásicos sabores de la cocina peruana, no hay nada como sus platos preparados con pescados y mariscos frescos. Con muchísimos kilómetros de costa, en ningún restaurante faltarán clásicos como el ceviche, el chiringuito y el sudado.

El centro de Máncora reúne decenas de opciones para comer, en las que se puede encontrar gastronomía local y también internacional. Además, su vida nocturna es destacada entre los turistas que llegan a la zona, con muchísimos bares y discotecas.

Qué ver

En Máncora y sus alrededores hay un sinfín de playas para disfrutar. Además de Las Pocitas, vale la pena conocer Zorritos, Punta Sal, Vichayito, Los Órganos y Cabo Blanco, entre muchas otras. Lo mejor de todo es que están muy cerca la una de la otra, y tienen opciones para todos los gustos, desde quienes buscan un lugar para nadar o relajarse bajo el sol, hasta los amantes del deporte extremo.

Hacia el interior se encuentra el Parque Nacional Cerro de Amotape, inmerso en un bosque seco tropical con circuitos de trekking para sumergirse en la naturaleza; allí, además, se puede navegar por el increíble cañón del río Tumbes. Muy cerca está la Reserva Nacional de Tumbes, un lugar al que hay que llegar en un vehículo 4x4 por la complejdad de sus caminos, pero que bien vale la pena conocer para adentrarse en su bosque tropical del Pacífico, hábitat de cientos de especies.

Si de arqueología se trata, el Museo de Sitio Cabeza de Vaca "Gran Chilimasa" guarda vestigios de las civilizaciones Chimú e Inca, donde aún se mantiene en pie una impresionante huaca y diversas excavaciones en las que se encontraron cerámicas, osamentas e instrumentos de piedra.


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