Niagara Falls
Ubicada a 640 kilómetros al noreste de Nueva York, Niagara Falls es una de las ciudades más llamativas del norte de Estados Unidos, pues en ella se encuentran las espectaculares Cataratas del Niágara. Sin duda es un lugar que vale la pena visitar para presenciar este verdadero espectáculo de la naturaleza.
Cuándo ir
La mejor época para visitar Niagara Falls es en los meses de primavera y otoño, sobre todo en mayo, septiembre, octubre y noviembre. La razón principal es que en invierno las temperaturas suelen bajar de los 0°C, y en verano se da la alta temporada turística, por lo que los atractivos de la ciudad suelen estar llenos de gente.
Clima
Niagara Falls presenta un clima muy similar al de Nueva York, con veranos calurosos e inviernos muy fríos en los que la nieve es un panorama muy frecuente. Durante los meses de verano las temperaturas comienzan a subir y sobrepasar los 20°C, alcanzando máximas de hasta 27°C en julio; por el contrario, durante el invierno varían entre los 5°C y los -1°C. Niagara Falls no es una ciudad particularmente lluviosa y las precipitaciones se reparten muy uniformemente durante todo el año.
Gastronomía
Niagara Falls se caracteriza por tener una enorme variedad gastronómica, pensada en la gran cantidad de turistas que llega a la ciudad atraída por las cataratas. A la hora de comer, los mejores restaurantes se concentran en las tres cuadras de Old Falls Street, una entretenida avenida que comienza en el Niagara Falls State Park.
Qué ver
No hay quien llegue a la ciudad de Niagara Falls sin el ánimo de visitar, precisamente, sus impresionantes cataratas. Ubicadas justo en la frontera de Estado Unidos con Canadá, por ellas fluyen más de tres mil toneladas de agua por segundo entre sus tres caídas: Horseshow Falls (51 metros), American Falls (53,6 metros) y Bridal Veil Falls (53,6 metros).
Para admirarlas en su esplendor, vale la pena pasear por el Niagara Falls State Park, con una entretenida ruta de senderos que conducen a miradores que ofrecen vistas privilegiadas a las cataratas. Así también, el barco Maid of the Mist permite navegar por entre medio de las caídas, en una experiencia que asegura una perspectiva sin igual. Por otro lado, vale la pena acercarse al parque de noche, cuando las cataratas se iluminan con luces de colores.
Saliendo del parque se inicia Old Falls Street, tres cuadras de calle empedrada llenas de entretención, con decenas de restaurantes, bares y cafés, un tablero de ajedrez gigante, arte callejero, tiendas y mucha actividad.
Los amantes del vino no pueden dejar de recorrer la Niagara Wine Trail, una ruta que permite adentrarse en el mundo de deliciosas cepas como Chardonnay, Riesling y Pinot Gris, entre las más destacadas. La mayoría de las viñas ofrece recorridos guiados con degustaciones de sus más deliciosas producciones.