Pipa
Después de unos días en Natal disfrutando de la ciudad, no hay nada como descansar y llenarse de la calma de Pipa. Este pueblo se ha convertido en uno de los lugares favoritos de los viajeros, porque es el destino de playa perfecto. Desde nadar con delfines hasta surfear o, simplemente, tomar sol con una caipirinha en la mano, el panorama ideal de las vacaciones está en esta zona del nordeste brasileño.
Cuándo ir
La mejor época para visitar Pipa es entre septiembre y diciembre, pues las temperaturas son agradables, no son meses lluviosos y no es temporada alta.
Clima
El clima en Pipa es cuasi ecuatorial, con temperaturas altas a lo largo de todo el año, que promedian los 30°C. La temporada lluviosa transcurre entre marzo y agosto, intensificándose entre mayo y junio.
Gastronomía
En Pipa destaca la gastronomía del nordeste de Brasil, donde la tapioca es una de las más grandes protagonistas. En cualquier restaurante de cocina local se puede pedir este plato hecho con harina de mandioca relleno con queso, jamón, tomate, etcétera. Así mismo, los crepes son clásicos del pueblo, pudiendo escogerlos rellenos con ingredientes dulces o salados. Por su parte, el asaí con leche condensada, plátano y frutos secos es una de las formas más ricas de refrescarse a cualquier hora del día.
La mayor parte de los restaurantes y bares se concentra en la Avenida dos Golfinhos y sus alrededores, muy cerca de la playa central de Pipa.
Qué ver
Pipa es una ciudad pequeña muy fácil de recorrer a pie en un solo día. Allí, la vida transcurre en torno a la Avenida dos Golfinhos, donde se concentra lo mejor de la oferta gastronómica y comercial. Entre sus atractivos, y dejando de lado las hermosas playas, destaca el Santuario Ecológico de Pipa, un parque con 16 senderos ecológicos de diversa intensidad; además, es la puerta de entrada para la hermosa playa de Madeiro.
Para quienes madrugan, no hay nada como ver salir el sol desde Chapadao, un mirador situado en un enorme acantilado sobre la playa Amor. Los colores rojizos de sus tierras contrastan con los verdes y azules del mar, entregando una postal inolvidable.
Playas
Caminando desde la playa central de Pipa se llega hasta la Bahia dos Golfinhos, cuyo acceso es exclusivamente por la arena cuando la marea está baja, por lo que hay que poner atención apenas vuelva a subir. Es una de las más famosas, porque alberga decenas de delfines que se dejan ver mientras juegan en el agua e, incluso, están acostumbrados a nadar cerca de las personas.
Un poco más hacia el norte está la playa de Maidero, que, con un kilómetro de extensión, se ha convertido en una de las más paradisíacas de Pipa. Además, tiene restaurantes y bares para disfrutar sin tener que salir de ahí. De Pipa hacia el sur se encuentra la playa Amor, una de las favoritas de los surfistas por sus excelentes olas para practicar este deporte.
Más al sur, en Tibau do Sul, está la playa de Sibaúma, alejada de las aglomeraciones y con aguas tranquilas y cálidas, perfectas para nadar. En el pueblo hay restaurantes, por lo que se convierte en el lugar perfecto para pasar el día.