La mejor época para visitar Pucón es entre septiembre y mayo, pues son meses con buen clima y menos probabilidades de lluvia, aunque nunca se sabe cuándo precipitará. Sin embargo, es entre diciembre y febrero cuando se da la temporada de mayor afluencia turística.

Pucón tiene un clima bastante lluvioso durante todo el año, con una cantidad de precipitación media anual de 2.238 milímetros. En verano las temperaturas pueden alcanzar fácilmente los 31°C, mientras que en invierno no llegan más allá de los 12°C. Sin embargo, otoño y primavera son estaciones bastante agradables, pues la temperatura suele bordear los 23°C.

La cocina de Pucón está fuertemente marcada por la influencia mapuche, por lo que en los restaurantes de comida local suelen estar presentes ingredientes como los piñones, las castañas y el merkén. Sin embargo, en el centro de la ciudad es posible encontrar opciones de todo tipo, con la comida internacional como la apuesta principal para los turistas.

Para disfrutar Pucón, vale la pena dar una vuelta por la pintoresca ciudad y, si es verano, pasar el día en la playa Grande. Con cuatro kilómetros de extensión, es la más famosa del lago Villarrica y sus tranquilas aguas son perfectas para nadar o practicar deportes acuáticos. Sin embargo, los grandes atractivos de la zona están en los alrededores.

A sólo 9 kilómetros de Pucón, en pleno Parque Nacional Villarrica, se encuentra el volcán más famoso de la zona, conocido por su permanente actividad. A pesar de su fumarola constante, el Villarrica es uno de los pocos volcanes del mundo que permiten escalar hasta su cráter, en una experiencia impresionante para los fanáticos de la adrenalina. Sin embargo, para quienes prefieren no hacer trekking, muchos tours llevan a conocer las bases del volcán, incluyendo un recorrido por sus cuevas, que permiten conocer el interior de un volcán activo. Además, en la parte noreste se encuentra el centro de ski, con 16 pistas para todos los niveles.

El Parque Nacional Villarrica se puede recorrer a través de sus senderos que transcurren entre bosques de araucarias, ríos y lagunas, siendo también el habitat de diversas especies. Además del Villarrica, también guarda los volcanes Quetrupillán y Lanín.

Hacia el norte se localiza el hermoso lago Caburgua, un lugar tranquilo y conocido por sus hermosas playas (Negra y Blanca). Poco antes de llegar a él se ubica uno de los atractivos más típicos de La Araucanía: los Ojos del Caburgua. Se trata de dos cascadas que emanan producto del agua subterránea proveniente del lago, formando pozas de agua cristalinas. El camino hacia ellas es de una belleza natural inigualable, transcurriendo entre senderos rodeados por bosque nativo, uno de los que conduce hasta la laguna Azul, que debe su nombre al tono de sus aguas.

Cerca del lago Caburgua se localiza el Parque Nacional Huerquehue, uno de los más hermosos de toda la región, pues tales son los niveles de precipitaciones de la zona, que ha desarrollado vegetación de inigualable belleza. En el camino no sólo es posible avistar la fauna que habita en él, sino también deslumbrarse con las vistas hacia los lagos Verde y Tinquilco, pero sobre todo hacia la laguna El Toro.

Hacia la cordillera, la Región de La Araucanía ofrece innumerables termas, siendo las más famosas las Geométricas, Huife y río Blanco.