Salerno
Salerno es una ciudad portuaria situada al sureste de Nápoles. A los pies de los montes Lattari, Salerno es la segunda ciudad más poblada de la región de la Campania después de Nápoles. Eclipsada por otros enclaves turísticos como Pompeya, Capri o Sorrento, tiene una fantástica ubicación y conexión para hacer base durante una visita a la Costa Amalfitana, y no por nada es considerada la capital de la misma.
Asentada sobre los cimientos de un humilde pueblo pesquero, Salerno es hoy una ciudad contemporánea y ancestral a la vez, con un rico legado histórico y cultural.
Cuándo ir
El mejor período para visitar Salerno es de mayo a septiembre. De mayo a junio el clima es cálido, la primera está floreciendo y la temperatura del mar permite las primeras inmersiones. Julio y agosto es la temporada alta, cuando las playas y el mar están en su mejor momento y también se llenan rápidamente de gente. En septiembre, por su parte, las temperaturas siguen siendo cálidas y disminuye el turismo, por lo que podrás disfrutar de las playas y los pueblos con mayor comodidad y a menores precios.
Clima
El clima en Salerno es mediterráneo. En el invierno, de diciembre a febrero, hay períodos soleados que se alternan con períodos nubosos y lluviosos, con mínimas de 4 °C y máximas de 15 °C. En esta época, así como en el otoño, se acumulan las precipitaciones, siendo diciembre y enero los meses más lluviosos. El verano, por su parte, de junio a septiembre, es caluroso y soleado. En julio y agosto la máxima ronda los 34 °C.
Gastronomía
La cocina de Salerno se caracteriza por sus pastas, vegetales frescos y dulces típicos. En las callejuelas del centro histórico, Via dei Mercanti, Lungomare Trieste, Rione Duomo y alrededores encontrarás locales de quesos y embutidos, pizzerías, cafés, cervecerías y restaurantes donde probar los spaghetti alle vongole (con almejas), los gnocchi alla sorrentina (con salsa de tomates, cebolla, ajo y albahaca, y mozzarella), una auténtica pizza margherita en horno de leña, con el trío tomate, queso y albahaca. También puedes probar las crocché, croquetas de papa emblemáticas de la comida callejera, la pastiera, un pastel relleno de ricota dulce y fruta, un riquísimo helado o un aperitivi, normalmente un Aperol Spritz que sirven junto con diferentes tapas.
Qué ver
La parte histórica y casco antiguo de Salerno es el corazón de la ciudad, donde encontrarás varios de los lugares más importantes para visitar. Desde antiguos palacios hasta la catedral de Il Duomo -construida sobre las ruinas de un templo romano, con sus puertas de bronce bizantinas y su impresionante cripta barroca donde está enterrado San Mateo- hasta la Via dei Mercanti, la arteria principal llena de tiendas, restaurantes y cafeterías, que siguen manteniendo la arquitectura medieval y religiosa original.
La Avenida Lungomare Trieste es un paseo marítimo de casi 2 kilómetros que conecta el Porto Turístico y la Piazza della Concordia con el centro histórico. Verás palmeras y edificios históricos por un lado, y el hermoso mar de la costa Amalfitana, por el otro, todo adornado con flores, y escaleras y pasillos que conducen directamente a la playa.
Enfrente de la avenida se encuentra el Palacio de San Agostino, inicialmente un monasterio dedicado a San Agostino, con una preciosa fachada de estilo neoclásico. La iglesia de San Benedetto, por su parte, fue construida alrededor de la misma época que la catedral, entre el siglo XI y XII, y originalmente formaba parte del monasterio con el mismo nombre.
Otra de las joyas que puedes visitar en el barrio medieval es el acueducto del siglo VIII, que proveía agua a la ciudad desde las montañas cercanas. Es imposible no advertirlo con sus grandes arcos divididos en dos ramales que se unen en la Via Arce. Aunque hoy tenga una longitud de unos cientos de metros, originalmente llegó a medir 650. Los locales lo llaman los arcos del diablo por una leyenda que dice que la construcción se llevó a cabo en una noche con la ayuda de demonios convocados por un mago.
En Salerno surgió la universidad de medicina más antigua del mundo, y el Jardín de Minerva es una de sus huellas. El mismo fue creado en el siglo XVIII por Matteo Silvatico como un área educativa donde los médicos enseñaban a los estudiantes a reconocer plantas medicinales.
En Salerno también encontrarás preciosos jardines como el de la Villa Comunale, que se encuentra en pleno centro de la ciudad. Se originó alrededor de una de las fuentes más conocidas, la Fontana di Don Tullio, conocida popularmente como Fontana di Esculapio por calmar la sed de los viajeros que llegaban a la ciudad por mar y tierra.
En la cima del monte Bonadies se encuentra el castillo secular de Arechi, construido en el siglo VII, que ofrece vistas de la ciudad y del golfo. En el interior hay un museo donde se exhiben monedas y cerámicas medievales.
A 37 kilómetros de Salerno se encuentra el Templo de Neptuno, el más grande y mejor conservado en el área arqueológica de Paestum. Construido aproximadamente a mediados del siglo V a.C., reúne todas las características clásicas de la arquitectura de los templos griegos.