Desde épocas bíblicas, la ciudad israelita de Tiberíades ha sido el escenario de hechos históricos y emblemáticos, adquiriendo enorme importancia tanto para los cristianos como para los judíos, quienes la consideran una de sus cuatro ciudades santas.

Todos estos acontecimientos –incluyendo el milagro de cuando Jesús caminó sobre las aguas del mar de Galilea o lago Kinneret– han llevado a Tiberíades a convertirse hoy en uno de los grandes epicentros turísticos de Israel, atrayendo a miles de personas cada año.

Cuándo ir

La mejor época para viajar a Tiberíades es entre marzo y mayo, y de octubre a noviembre. Los veranos suelen ser excesivamente calurosos, mientras que los inviernos algo fríos.

Clima

Tiberíades tiene temperaturas bastante elevadas a lo largo de todo el año. Mientras en invierno las máximas no bajan de los 18°C, en verano éstas suelen llegar incluso a los 35°. En cuanto a las lluvias, son bastante escasas y se acumulan entre diciembre y marzo.

Gastronomía

La cocina de Tiberíades es bastante similar a la del resto de Israel, con platos típicos como el falafel. Diversos locales lo venden caliente, recién hecho, en un complejo muy cercano a la lonja del pescado y del paseo marítimo, donde llegan los barcos de los pescadores.

Así también, el pescado de San Pedro es otro imperdible en la gastronomía local, cocinado de diversas maneras según cada restaurante. Los mejores se encuentran en la Ciudad Vieja y sus alrededores, como también en las zonas cercanas al mar de Galilea.

Qué ver

Tiberíades es una localidad pequeña y lo más entretenido, turísticamente hablando, se concentra en la Ciudad Vieja. Dar una vuelta por esta zona es una invitación a conocer sitios como la fortaleza de Daher El-Amar, un baño ritual judío, las ruinas de la muralla que rodeaba la ciudad y la iglesia de San Pedro.

Al mismo tiempo, la Ciudad Vieja se ha ido mezclando poco a poco con la modernidad, pues en ella se ha desarrollado una intensa oferta comercial, gastronómica y hotelera.

Una pasarela conecta a la Ciudad Vieja con el paseo marítimo, desde donde salen las embarcaciones que realizan los tours por el lago, y también excelentes restaurantes de pescado.

Por otro lado, Tiberíades cuenta con exquisitas playas, como The Quiet Beach, Lido, Arbel, Dekel y Gai. Famoso es también el parque acuático Aqua Kef, con entretenidos juegos inflables que flotan en el agua, atrayendo a familias durante las épocas más calurosas del año.

Al sur de Tiberíades se encuentra el Parque Nacional Hamat Tiberias, con sus 17 fuentes termales que guardan más de dos mil años de historia. Sus aguas se encuentran a 60°C y contienen un centenar de minerales que les otorgan propiedades terapéuticas, alimentando los múltiples baños termales que se encuentran en sus alrededores.