Cada año, cientos de tortugas verdes llegan a las playas del Parque Nacional Tortuguero a desovar, generando un espectáculo de la naturaleza que muchos viajeros buscan presenciar en primera persona. Sin embargo, en este lugar y sus alrededores hay una diversidad biológica impresionante, que convierte a la zona en uno de los lugares más atractivos de la costa atlántica de Costa Rica.

La mejor época para viajar a Tortuguero es durante los meses de marzo, abril, septiembre y octubre, pues son los meses en que llueve menos. Sin embargo, hay que destacar que entre julio y octubre se produce uno de los fenómenos naturales más hermosos que dan vida al nombre de la localidad: el desove y nacimiento de las tortugas.

Ubicada en la costa atlántica de Costa Rica, la localidad de Tortuguero es una de las zonas más húmedas y lluviosas de todo el país. Sin embargo, siempre goza de altas temperaturas, con máximas promedio que fluctúan entre los 25°C y los 30°C a lo largo de todo el año.

Con el arroz y los frijoles como parte de los ingredientes infaltables en la cocina de Tortuguero, muchos restaurantes locales ofrecen platos típicos como el casado, que además lleva carne o pescado y plátano frito. Asimismo, nunca pueden faltar los pescados o mariscos, sobre todo los camarones y la langosta.

La mayor parte de la oferta gastronómica de Tortuguero se encuentra concentrada en el pueblo, con pequeños restaurantes de onda local en los que los platos típicos y las opciones más clásicas siempre están presentes.

Todos quienes llegan a esta localidad lo hacen, sin duda, para conocer el Parque Nacional Tortuguero, donde se concentra una de las más grandes variedades biológicas de todo Costa Rica, pues en él no sólo coexisten once hábitats, sino también dos mil especies de plantas y 400 de árboles. Sin embargo, el mayor espectáculo del lugar se produce entre julio y octubre, cuando cientos de tortugas verdes llegan a las playas para anidar, terminando el período con el nacimiento de las crías.

Vale la pena también vivir la experiencia de navegación por sus canales y lagunas, en las que con algo de suerte se pueden ver tortugas de río, manatíes, cocodrilos, caimanes, crustáceos y peces, mientras que los alrededores son el hogar de monos, jaguares, mapaches, murciélagos y ranas, entre otros animales.

Enclavado entre océano y canales, el pueblo de Tortuguero es un tranquilo lugar donde no existen los autos y, dado el atractivo turístico que genera el parque, cuenta con una entretenida oferta de restaurantes, bares y pequeñas tiendas. Muy cerca está también el Sea Turtle Conservancy, un centro de conservación que protege diversas especies de tortugas marinas.