Vicuña, el principal centro urbano del valle de Elqui, se caracteriza por poseer una hermosa arquitectura de adobe, con construcciones que aún se conservan del periodo colonial y una arbolada plaza central.

Antiguamente, la zona era habitada por la cultura diaguita y, con la llegada de los españoles, comenzó a desarrollarse el cultivo de viñedos, dando origen a la producción de su destilado más famoso: el pisco chileno. Por otro lado, la Región de Coquimbo es considerada internacionalmente como uno de los mejores lugares para la observación astronómica, por lo que cuenta con observatorios de uso científico y público como el Mamalluca y el del cerro Tololo. Esta conjunción le ha dado el reconocimiento a Vicuña de capital del astroturismo y del pisco chileno, además de ser el hogar donde nació y creció la poeta chilena Gabriela Mistral, Premio Nobel de Literatura.

Si estás buscando un destino para visitar en pareja, con amigos o en familia, para combinar paseos y descanso, Vicuña es para ti.

Cuándo ir

Debido a su clima agradable, se puede visitar Vicuña durante todo el año. Si lo que buscas es enfocarte en el astroturismo, la época más despejada del año va desde octubre hasta abril, siendo febrero el mes con menor nubosidad. 

Clima

El clima en Vicuña es semiárido, con aproximadamente 300 días y noches al año totalmente despejados, baja humedad y una gran oscilación térmica entre el día y la noche. Durante el verano la temperatura media es de 28° C, alcanzando en ocasiones una máxima de 35° C. Las precipitaciones, aunque escasas en el año, se dan principalmente en invierno, en junio y julio, cuando además llega el viento local denominado terral. De todas formas, durante el invierno las temperaturas también son agradables durante el día, con máximas de alrededor de 20°C.

Gastronomía

La gastronomía de Chile es una mezcla entre la cultura indígena y el aporte de la herencia española. La mayoría de los platos incluyen choclo o maíz, papa, zapallo y porotos, combinados con distintas carnes, especialmente de cabra, que puedes probar asada, a la olla o en forma de charqui, una carne deshidratada que puede consumirse directamente. El queso de cabra también es típico.

Otros platos que puedes probar en Vicuña son las clásicas empanadas chilenas, rellenas de carne picada y huevo duro, conocido como pino; las humitas, una comida clásica compartida con otras regiones andinas, que consiste en una preparación de choclo tierno condimentado y envuelto en sus propias hojas; la cazuela, una sopa de verduras con carne que puede ser pollo, ternera o cordero; los porotos, cuyas formas más famosas son granados y con riendas; el pastel de choclo, que consiste en una base de carne picada y presas de pollo, cubierta de una mezcla de choclo.

Por supuesto, es casi indispensable probar un vino chileno y los piscos producidos en la zona, con el que se hace el famoso pisco sour, un cóctel preparado con pisco, clara de huevo y jugo de limón.

Qué ver

Vicuña es una mezcla interesante entre gastronomía, observación de cielos e historia. Caminando por las calles de la ciudad se pueden conocer antiguas construcciones que mantienen el diseño de principios de 1900: la Plaza de Armas, el templo de la Inmaculada Concepción; la torre Bauer, la iglesia parroquial, la sala Cabildo, el Museo Histórico, la Casa y Museo Salar de los Madariaga, y el Museo Entomológico de Historia Natural. Un sitio a destacar es el Museo Gabriela Mistral, ubicado en la calle del mismo nombre, dedicado a la vida y obra de la poeta chilena Premio Nobel de Literatura. Fue edificado en la casa original de la poeta, donde vivió los primeros años de su vida, manteniéndose intacta hasta hoy.

A pocos kilómetros de la ciudad se encuentra la Ruta del Pisco, a través de la cual se puede visitar las fábricas pisqueras Ruta Norte, Capel, Mistral, Tres Erres y Artesanos de Cochiguaz. 

Otra actividad imperdible, especialmente porque existen pocos lugares en el mundo en que el cielo presenta las condiciones de nitidez que existen en Vicuña, es visitar alguno de los observatorios astronómicos. Puedes ir al Observatorio Mammalluca, ubicado a 9 kilómetros al norte de la ciudad, o al Observatorio Interamericano Cerro Tololo, para admirar el universo, la luna y los planetas través de sus telescopios.

En los alrededores de Vicuña puedes conocer diferentes poblados. En El Molle, por ejemplo, se descubrieron los primeros vestigios de la cultura prehispánica del mismo nombre. Allí también puedes conocer su iglesia y probar los dulces chilenos y comidas a base de carne de cerdo. En San Isidro, un poblado de antiguas casonas con huertos frutales, se encuentra una de las iglesias más antiguas del valle, cuyo piso está hecho con estacones de algarrobo, a la antigua manera española. Otro lugar es Peralillo, un antiguo poblado agrícola con una gran producción de uva de mesa, duraznos y damascos. En Villaseca hay restaurantes que preparan las comidas en hornos y cocinas solares. En Diaguitas, declarada zona típica por sus antiguas casonas que mantienen una construcción uniforme, casi únicas en el valle, se destacan los alfareros de tradición diaguita.

En el embalse Puclaro, por su parte, hay una ribera habilitada como playa junto al pueblo de Gualliguaica, el cual fue trasladado desde el valle actualmente bajo el agua hacia las orillas del embalse. Desde la costanera del pueblo se puede observar el embalse y parte del antiguo Gualliguaica, hoy sumergido bajo las aguas de la presa.