Florianópolis

Ubicada en la zona sur de Brasil, en el estado de Santa Catarina, la ciudad de Florianópolis es de esos destinos que vale la pena visitar al menos una vez en la vida. Además, es la capital del estado homónimo, conocida como “Ilha da magia” por sus mágicos sitios para visitar durante tu estadía.

La ciudad lleva ese nombre en honor a Floriano Vieira Peixoto, quien fue presidente del país entre 1891 y 1894. Gracias a sus increíbles playas, es el lugar perfecto para los amantes del surf y otros deportes acuáticos; así como también para quienes buscan disfrutar exquisita gastronomía de mar. A su vez, está muy cerca de Camboriú, por lo que puedes aprovechar tu viaje para visitar ambas ciudades a la vez.

Cuándo ir

La mejor época para visitar Florianópolis es durante todo el año, pues cuenta con un excelente clima. Aunque la temporada más templada es entre diciembre y marzo; mientras que la más fresca va de junio a agosto.

Clima

Florianópolis tiene un clima subtropical húmedo, sin estación seca, con un verano muy caluroso y con lluvias frecuentes en primavera y verano. La temperatura máxima media es de 24°C a lo largo del año; con mínimas de 20°C en julio a máximas de 28°C en febrero. En cuanto a precipitaciones, el promedio anual es de 1.781mm; con un mínimo de 96mm en noviembre, y un máximo de 214mm en enero.

Gastronomía

La oferta gastronómica de Florianópolis está basada en pescados y mariscos, donde la gran protagonista es la ostra, pues en la región se producen 3 millones de docenas al año. Gracias a su popularidad, se sirve de mil y una formas como naturales con un toque de limón o gratinadas con queso. Dentro de los platos típicos del mar están el pirão de peixe, una especie de papilla que se prepara con pescado blanco, harina de mandioca y condimentos; la tainha frita, asada o rellena; el pastel de berberechos, un molusco muy popular en esta región que se prepara en forma de pastel con masa de hojaldre, sofrito y otros ingredientes; y anchoa a la plancha o anchova grelhada. Otras comidas que puedes probar son la feijoada o guiso de frijoles, carne de cerdo y verduras; el pao de queijo; y el queijo coalho. Para el postre, el brigadeiro y el beijinho son los más famosos en la cultura brasileña.

Una de las mejores zonas para comer es el Mercado Público, donde podrás degustar algunos de los más exquisitos platillos locales. También puedes disfrutar la Rota Gastronómica do Sol Poente en el barrio Santo Antônio de Lisboa o ir a las ferias Lardo da Alfandega y Consejero María. 

Qué ver

Parte tu recorrido por el barrio histórico de Santo Antônio de Lisboa, con su esencia europea gracias a sus calles adoquinadas, casas de colores y plazas peatonales como Praça Getúlio Vargas. Continúa en la Plaza XV de Novembro, donde está la Catedral Metropolitana de Florianópolis,​​ dedicada a Nuestra Señora del Destierra. Aprovecha de conocer el otro lado de la ciudad cruzando el puente colgante Hercílio Luz, mientras disfrutar las maravillosas vistas panorámicas desde las alturas.

A 20 kilómetros del centro de Florianópolis está Ribeirão da Ilha, un pintoresco barrio de origen azoriano, que mantiene viva la tradición de sus primeros habitantes. Otros lugares imperdibles son el teatro Álvaro de Carvalho; las Dunas de Joaquina, donde puedes practicar sandboard; el Parque Nacional São Joaquim, donde puedes acampar al aire libre; y el Sendero y Laguna Río Rojo, para hacer kayak, canoa o stand-up paddle a través de sus manglares y arroyos.

Entre las playas de Forte y Jurerê encuentras el fuerte de São José da Ponta Grossa, una impresionante fortaleza de la época colonial que te mostrará cómo era la vida local en aquellos años. También puedes conocer otras fortalezas como Santo Antônio de Ratones y Santa Cruz de Anhatomirim.

Si te gusta la vida nocturna, en el barrio de Lagoa da Conceição podrás encontrar una amplia oferta de restaurantes, pubs y discotecas para todos los gustos. También destacan la Isla Cachacaria y la Cofradía de las Artes. Mientras que los fanáticos del senderismo pueden ir a Costa da Lagoa, una ruta entre bosques y con la hermosa Cascada Cachoeira al final del circuito.

No dejes de visitar la isla de Campeche, que no solo sorprende con sus playas y bahías aisladas, sino que también por estar rodeada de petroglifos datados hace miles de años. En la costa este se encuentra Barra da Lagoa, un pequeño pueblo costero con playas de arena blanca, exquisita gastronomía y un hermoso paseo marítimo para recorrer durante tu visita.

Playas

Florianópolis tiene más de 100 playas, varias de ellas catalogadas como vírgenes por su inaccesibilidad y poca presencia de turistas. Sin embargo, otras se han transformado en verdaderos paraísos entre quienes llegan a sus costas. La zona norte tiene playas más cálidas y con olas calmas, donde destacan Canasvieiras, Daniela, Lagoinha, Cachoeira do Bom Jesus, Ponta das Canas, Jurerê y Jurere Internacional. 

Si lo tuyo es el surf, el estado de Santa Catarina cuenta con variadas playas para practicar este deporte acuático. La mayoría se ubican en la zona este, pues hay más viento y olas abundantes como Praia Mole y Joaquina. Otras playas para surfear, bucear o hacer otras actividades acuáticas son Santinho, Moçambique, Campeche, Lagoinha do Leste, Armação do Sul y Matadeiro. A 90 kilómetros de la ciudad de Florianópolis está Praia do Rosa, rodeada de colinas verdes y con siete kilómetros de olas perfectas para los surfistas.