Una semana en Curazao: Todo lo que puedes hacer
El sol brilla intensamente sobre las aguas cristalinas del Mar Caribe, acariciando las playas de arena blanca y las coloridas construcciones que adornan a la isla de Curazao, parte de las Antillas Menores y un lugar donde querrás una semana de vacaciones, e incluso mucho más.
La historia diversa de Curaçao, Kòrsou o País de Curazao se remonta a la era de la colonización, cuando fue descubierto por el explorador español Alonso de Ojeda en 1499. A lo largo de los siglos, Curazao cambió de manos entre varias potencias europeas, incluyendo España, los Países Bajos y el Reino Unido, antes de convertirse en parte de las Antillas Neerlandesas.
Esta rica herencia se refleja en la arquitectura colorida de Willemstad, la capital de la isla, que ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Estas casas coloniales generan un contraste imponente ante el azul del mar, el principal protagonista de la aventura en Curazao.
Las siguientes siete sugerencias pueden potenciar tu viaje en Curazao. Estas actividades no te ocuparán durante todo el día, así que puedes combinarlas con la relajación en el hotel en el que te hospedes, probar el delicioso Keshi Yena en algún restaurante de la isla, vibrar en las noches antillanas en un bar y, por supuesto, pasar por alguno de los balnearios.
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Día 1: La aventura en Curazao comienza en Willemstad
Comienza tu viaje explorando Willemstad, donde las fachadas vibrantes te darán la bienvenida a un mundo de arquitectura única. El Puente Reina Emma, conocido cariñosamente como «El Puente Flotante», conecta los distritos Punda y Otrobanda, ofreciendo vistas panorámicas mientras paseas por sus aceras llenas de encanto. No te pierdas el barrio de Scharloo, donde las mansiones coloniales holandesas han sido restauradas para albergar galerías de arte y boutiques exclusivas.
Día 2: Naturaleza y vida marina
Para los amantes de la naturaleza, una visita al Shete Boka National Park es imperdible. Este parque ofrece una serie de calas escarpadas donde las olas del océano Atlántico chocan contra los acantilados, creando un espectáculo natural impresionante. Durante ciertas épocas del año, las tortugas marinas también hacen acto de presencia. Explora el Acuario Marino de Curazao para descubrir la vida submarina local y, si eres aventurero, aventúrate en una emocionante sesión de buceo en los arrecifes de coral de Isla Klein, a unos 16 km en barco de la isla principal.
Día 3: Primera parada playera en Kenepa
Las playas de Curazao son famosas por sus aguas cristalinas y arena blanca. Playa Kenepa, también conocida como Knip Beach, es una de las más impresionantes y que son dos playas en una. El contraste entre el intenso azul del mar y el verde exuberante de los alrededores crea un paisaje idílico para relajarse y disfrutar del sol caribeño. Sus zonas para snorkel son de las más famosas del Caribe.
Día 4: El majestuoso monte Christoffel de Curazao
No todo se trata de playas en Curazao. Dirígete al Parque Nacional Christoffel para vivir una experiencia inigualable en la naturaleza. Escala el Monte Christoffel para obtener vistas panorámicas de la isla. Descubre la fauna y flora únicas en su hábitat natural y sumérgete en la historia de la plantación Savonet. Un día lleno de aventuras que te conectará con la esencia más salvaje de esta isla.
Día 5: Más historia en Otrobanda
Cruza el puente Reina Emma nuevamente para explorar el vibrante distrito de Otrobanda, la zona más antigua de Willemstad. Visita el Museo Kurá Hulanda para conocer la historia de la esclavitud y la cultura africana. Disfruta de la arquitectura colonial y sumérgete en la energía cultural del Mercado flotante de Punda. La noche puede culminar con una cena en uno de los restaurantes locales, donde la música y la gastronomía crean una experiencia inolvidable.
Día 6: Más playas en Curazao
Si no te bastó con Kenepa, las arenas blancas de Playa Cas Abao y la Playa Porto Mari te esperan. Relájate bajo el cálido sol caribeño, da un paseo por la orilla del mar y disfruta de la serenidad que ofrecen estas joyas costeras.
Día 7: Hiking en las Cuevas de Hato
Dedica parte del día a explorar a fondo las fascinantes Cuevas de Hato, un sistema de cuevas calizas que esconde formaciones geológicas únicas y testimonios de la historia de la isla. Para llegar a ellas, deberás subir unos 50 escalones aproximadamente, y aunque son espacios cerrados, son amplios e iluminados, en los que verás estaclatitas, estaglamitas y murciélagos totalmente inofensivos.
Con un clima tropical durante todo el año, playas de ensueño, una vida marina excepcional y una oferta culinaria irresistible, Curazao garantiza una experiencia inolvidable. Esta isla es un destino completo que hará feliz a todos los tipos de viajeros, ya sea por una semana, un mes o la vida entera.
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